miércoles, 20 de julio de 2011

Del porqué de mi blog

Llevaba tiempo dándole vueltas a esto de crear un blog y, por fin, me he decidido.
¿Qué me frenaba? Primero, la pereza; la misma pereza que hace que mi diario contenga saltos temporales de hasta dos años. Segundo, los contenidos. ¿De qué voy a escribir? ¿A quién le va a importar lo que yo pueda comentar? Y es que este blog no pretende ser mi diario, sino que me gustaría hablar de cosas que tienen que ver con mi vida laboral, aunque seguramente acabaré hablando de mis aficiones también, que me conozco.

¿Quién soy? ¿Qué soy? Soy licenciada en Traducción e Interpretación, correctora y profesora de ELE (y a veces de francés), así que creo que queda claro que me gustan las lenguas. Y es en torno a ellas que me gustaría hablar aquí. Por ello debía encontrar un título para el blog que representase un poco esto, y es una de las cosas que más me ha costado, porque tenía que sentirme identificada.
Palabra de traidora: Palabra, la palabra escrita, la palabra oral, ya sea en castellano o en otra lengua, medio de comunicación; Traidora, la traductora, intentando ser fiel a la palabra original y, sin embargo, sin quererlo, a veces traicionando su sentido. Palabra de traidora, la transmisora de palabras, la traidora de palabras, ¿puedes fiarte de ella? Ella da su palabra de que sí...

¿Cómo soy? Apasionada de mi trabajo, perfeccionista, exigente. En mi tiempo libre sigo unida a las palabras mediante la lectura (novelas, cómics, revistas de divulgación...), pero todo el mundo necesita algo más, y mi algo más son el cine, el senderismo, la cocina, la música y diversos formatos de juegos.

Y esta soy yo. Espero que mis artículos y yo os gustemos.